Por Máximo Cerdio

Jojutla, Morelos; México; 19 de enero de 2024. Organizaciones civiles convocaron a una marcha para protestar en contra de las amenazas de Donald Trump de iniciar en Chicago la mayor deportación de migrantes en la historia de Estados Unidos y firmar el primer día de su mandato 100 acciones ejecutivas, muchas de ellas antiinmigrantes.

En esta reacción ciudadana contra la que será la primera medida antiinmigrante del presidente electo de Estados Unidos, se convocó a la ciudadanía en dos puntos de reunión: un contingente saldrá de la avenida Chicago y Michigan, a las 11:00 horas y el segundo de la plaza Daley a la misma hora, teniendo como punto de llegada edificio de Trump qué está sobre la avenida Michigan.

Allí se realizará un mitin en el que se fijarán posturas y estrategias contra la que se ha considerado la amenaza de acción más racista de los tiempos modernos.

La marcha de protesta fue difundida ampliamente en México por organizaciones y también por la diputada migrante morenista Roselia Suárez Montes de Oca.

En la Ciudad de México, diferentes organizaciones estarán protestando, varias han convocado a las afueras de la embajada estadounidense a protestar, llevando una piñata del presidente para quemarla.

El número de mexicanos en riego de ser deportados de Estados Unidos por permanecer en ese país de forma irregular asciende a 4.9 millones, de acuerdo con el Colegio de la Frontera Norte (Colef).

Donald Trump regresará como el mandatario número47 de la entidad, esto tras ocupar el puesto previamente en el puesto 45.

El lunes 20 de enero será para la toma de protesta, o el ‘Día de la Inauguración Presidencial’ y se llevará a cabo dentro del Capitolio en Washington D.C., a las 10:00 horas, tiempo del centro de México.

El acto gubernamental será encabezado por Donald Trump, quién marcaría su emblemático regreso a la presidencia de Estados Unidos.

Al ser un evento de índole oficial, algunos medios locales en México esperaban la participación de la titular del Ejecutivo, Claudia Sheinbaum Pardo; sin embargo, la dirigente externó en diversas ocasiones que la invitación nunca le llegó, lo que no generaba ningún inconveniente en la relación diplomática con Estados Unidos.